Fuente
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, quien le dio al gallo el entendimiento para distinguir entre el día y la noche.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, אֲשֶׁר נָּתַן לַשֶּׂכְוִי בִינָה לְהַבְחִין בֵּין יוֹם וּבֵין לָיְלָה.
Versiones modernas:
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que me hiciste judío.
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que me hiciste hombre/mujer libre.
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que me hiciste a tu imagen.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, שֶׁעָשַׂנִי יִשְׂרָאֵל.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, שֶׁעָשַׂנִי בֶּן / בַּת חוֹרִין.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, שֶׁעָשַׂנִי בְּצַלְּמוֹ.
Bendiciones tradicionales:
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que no me hiciste gentil.
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que no me hiciste esclavo/a.
Hombres dicen >Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que no me hiciste mujer.
Mujeres dicen >Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que me hiciste acorde a tu voluntad.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, שֶׁלּא עָשַּׁנִי גּוֹי/ה.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, שֶׁלּא עָשַּׁנִי עָבֶד/שִׁפְחָה.
dicen Hombres < בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, שֶׁלּא עָשַּׁנִי אִשָׂה.
dicen Mujeres < בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, שֶׁעָשַּׁנִי כִּרְצוֹנוֹ.
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que abres los ojos de los ciegos.
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que vistes a los desnudos.
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que liberas a los cautivos.
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que yergues a los sumisos.
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que extiendes la tierra sobre las aguas.
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que guías los pasos del hombre.
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que provees todas mis necesidades.
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que ciñes a Israel con gallardía.
Bendito eres tú Señor, Di-s rey del universo, que coronas a Israel con gloria.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, פּוֹקֵחַ עִוְרִים.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, מַלְבִּישׁ עֲרֻמִּים.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, מַתִּיר אֲסוּרִים.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, זוֹקֵף כְּפוּפִים.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, רוֹקַע הָאָרֶץ עַל הַמָּיִם.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, הַמֵּכִין מִצְעֲדֵי גָבֶר.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, שֶׁעָשָׂה לִי כָּל צָרְכִּי.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, אוֹזֵר יִשְׂרָאֵל בִּגְבוּרָה.
בָּרוּךְ אַתָּה ה’, אֱ-לֹהֵינוּ מֶלֶךְ הָעוֹלָם, עוֹטֵר יִשְׂרָאֵל בְּתִפְאָרָה.
Bases para la planificación de la enseñanza
Preguntas fundamentales
- ¿De qué manera las costumbres judías reflejan los valores judaicos?
- ¿Cómo enriquecen los rituales y costumbres judías la forma en que vivo mi vida y mi relación con el mundo?
- ¿Cómo influye mi judaísmo en mi vida cotidiana y semanal?
Preguntas de contenido relacionadas con preguntas fundamentales
- ¿De qué manera estas oraciones nos enseñan sobre la importancia de la gratitud?
- ¿Cómo podemos fortificar nuestros “músculos” de apreciación de las cosas buenas y de agradecimiento?
- ¿De qué manera las oraciones nos alientan a estar más conscientes/presentes en nuestra vida cotidiana?
Información para el docente
Las bendiciones matutinas (Birkot hashajar) forman parte del servicio de oración Shajarit. Ellas expresan gratitud por acciones que podemos llegar a darlas por sentado, dado que forman parte de la rutina diaria, tales como pararse erguidos, vestirse y calzarse los zapatos. De acuerdo con...
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Las bendiciones matutinas (Birkot hashajar) forman parte del servicio de oración Shajarit. Ellas expresan gratitud por acciones que podemos llegar a darlas por sentado, dado que forman parte de la rutina diaria, tales como pararse erguidos, vestirse y calzarse los zapatos. De acuerdo con el Talmud (Brajot 60B, ver en Actividad Extra más abajo) debemos decir cada bendición al momento de realizar la acción relevante. Por ejemplo, cuando nos despertamos y abrimos los ojos se debe decir “que abres los ojos de los ciegos”, cuando nos vestimos debemos decir “que vistes a los desnudos”. Actualmente se suelen recitar todas las bendiciones continuadas como parte del servicio matutino de Shajarit, y no como bendiciones individuales. Las referencias en las bendiciones a esas actividades cotidianas y rutinarias le agregan una dimensión de conciencia y percepción a la vida diaria.
Las primeras bendiciones tratan sobre de la existencia humana. En las bendiciones tradicionales agradecemos por pertenecer al pueblo judío, por nuestro estatus de seres libres y por nuestro género. Hay una diferencia en cuanto a hombres y mujeres, ya que en la visión de Jaza”l (Nuestros sabios de bendita memoria) el hombre cuenta con ventaja pues está obligado a cumplir más mitzvot -que ellos consideraban un privilegio- y es recompensado por ello. Enfoques contemporáneos proponen una alternativa a estas bendiciones, focalizando el agradecimiento por quiénes somos, y no en contraposición a otros. Estas bendiciones alternativas invitan a dialogar sobre el dinamismo de las oraciones, reflejando así los cambios de actitudes y valores en las diferentes épocas
Para presentar la idea del agradecimiento por las cosas rutinarias, dividir a los alumnos en Jevrutot (parejas de estudio). Entregar a cada pareja una lista con 10 acontecimientos y eventos de la vida. La lista deberá contener
acontecimientos importantes y otros eventos relacionados con el levantarse por la mañana, reflejados en Birkot Hashajar. (Por ejemplo: graduación de la escuela, ganar una competición, abrir los ojos por la mañana, congratulación del maestro, vestirse, recibir un regalo importante, etc.)
- Pedir a los alumnos debatir en jevruta: ¿Cuáles eventos creen uds. merecen ser bendecidos y cuáles no?
- Mantener un debate entre aquellos alumnos que apoyan la idea que se debe bendecir los pequeños eventos y aquellos que no. Preguntarles si la capacidad de caminar o el hecho de tener prendas para vestirnos se pueden dar por sentado. ¿En qué circunstancias dejan de ser una triviales?
- Escribir en la pizarra las actividades que aparecen en Birkot Hashajar. Explicar que en la tradición judía bendecimos y agradecemos por cada una de esas acciones, aparentemente triviales, cada mañana.
- En Birkot Hashajar agradecemos por las acciones que hacemos al levantarnos por la mañana. ¿Pueden identificar a qué actividades se refiere el texto?
- ¿Existen otras acciones relacionadas con nuestra rutina matutina que merecen una bendición? ¿Quitarían alguna de las bendiciones tradicionales? ¿Por qué?
- La mayoría de nosotros considera esas acciones comunes y rutinarias. ¿Por qué debemos bendecirlas? ¿Qué podemos aprender de ello?
- Los sabios podrían haber decidido recitar una sola bendición al comienzo del día – “Gracias por todo lo que tengo”. ¿Por qué creen que era importante para ellos especificar cada una de las acciones? ¿Qué podemos aprender de ello en cuanto a cómo debemos agradecer a los demás?
- Para alumnos mayores: ¿Qué diferencia hay en realizar una acción rutinaria a conciencia y hacerla automáticamente? Den ejemplos de actividades automáticas que ustedes hacen. ¿Habría alguna diferencia si las hiciésemos a conciencia?
- Recitar una oración diaria de agradecimiento pueden convertirse por sí mismo en una rutina. ¿Cómo podemos enfrentar esta dificultad?
- Dividir los alumnos en parejas y pedir a cada una de ellas examinar las bendiciones y crear gestos o dramatizaciones breves que ilustren las acciones de cada bendición. Después puede examinar la lista y pedir a los alumnos hacer una representación frente a la clase.
- Para ejercitar sus “músculos de agradecimiento”, pedir a los alumnos que agreguen sus propias bendiciones a las acciones que realizan por la mañana y que no están mencionadas en Birkot Hashajar. Pueden preparar pancartas decorativas con las bendiciones y colgarlas en el aula bajo la consigna “¡Prestamos atención y damos las gracias!” Se puede ampliar la actividad incluyendo acciones acaecidas en el transcurso del día.
- Jugar un juego para reforzar la concientización de las pequeñas, aunque importantes acciones en nuestras vidas:
Pedir a los alumnos proponer la mayor cantidad de acciones cotidianas posibles, que solemos hacer de manera rutinaria sin prestar atención, “automáticamente”. Escribir las acciones en la pizarra (si hicieron la actividad del disparador opcional, pueden usarla aquí como punto de partida). Pedir a los alumnos responder a las preguntas o realizar actividades breves (anteriormente preparadas) que ayuden a valorar la singularidad de cada acción y su importancia.
Repartir las hojas con las preguntas/actividades o leerlas a toda la clase, eligiendo cada vez a otro alumno para cumplimentarlas. Por ejemplo: Si esta acción no existiera en el mundo, entonces…
Estoy agradecido por esta acción, porque gracias a ella…
Escriban una bendición dedicada a esta acción.
Es importante no hacer esta actividad automáticamente porque… Etc.
- Estudiar la oración Modé/Modá Aní – Yo agradezco que también está relacionada con el agradecimiento de levantarnos por la mañana. ¿Cuáles son las similitudes y las diferencias entre esta oración y Birkot Hashajar?
- Estudiar las bendiciones Birkot Hanehenim, que expresan agradecimiento tanto por las cosas que disfrutamos diariamente como también por eventos extraordinarios. Preguntar a los alumnos con qué tipo de bendiciones se identifican más – con aquellas dedicadas a cosas cotidianas o con las relacionadas a sucesos excepcionales. ¿Por qué?
- Estudiar el texto del Talmud que describe las acciones que hacemos por la mañana y las bendiciones correspondientes.
“Al oír el canto del gallo, debemos decir: Bendito… que le dio al gallo el entendimiento para distinguir entre el día y la noche.
Al estirar nuestros miembros y sentarnos, debemos decir: Bendito… que liberas a los cautivos.
Al vestirnos, debemos decir: Bendito…que vistes a los desnudos. Al erguirnos, debemos decir: Bendito…que yergues a los sumisos. Al bajar de la cama y poner los pies en el suelo, debemos decir: Bendito…que extiendes la tierra sobre las aguas.
Al caminar, debemos decir: Bendito…que guías los pasos del hombre. Al calzarnos los zapatos, debemos decir: Bendito…que me provees de todas mis necesidades.
Al ceñirnos el cinturón, debemos decir: Bendito…que ciñes a Israel con gallardía.
Al cubrirnos con el manto (pañuelo/bufanda) sobre nuestra cabeza, debemos decir: Bendito… que coronas a Israel con gloria.”(Talmud babilónico, Brajot 60b)